Uno de los peores problemas de las personas con problemas financieros, es la falta de educación sobre cómo administrar el dinero. Por ejemplo, hay muchas de estas personas que gastan su dinero en productos totalmente innecesarios cuando no es una prioridad para sus vidas. Otra de las prácticas que dañan las finanzas personales muy a menudo es generar deuda y no poder pagarla a tiempo por consecuencia de la mala administración del efectivo.
Este tipo de conductas son nocivas para el bolsillo de cada persona que las lleva acabo, ya que quien tenga estos hábitos muy difícilmente pueda prosperar y desarrollar una mayor independencia sobre si mismo logrando como resultado un estancamiento en la clase social que posea e impida que avance.
Es por eso que es necesario crear en la sociedad una cultura del ahorro (para una posterior inversión) y de la sabia administración con el fin de evitar gastos innecesarios y el derroche de dinero.
El ahorro más favorable para la economía es en los bancos, no el denominado “ahorro de colchón” ya que el depositar dinero en las entidades bancarias hace que cuenten con mayores divisas para otorgar préstamos y de esta manera con el dinero en movimiento dentro del sistema financiero se favorece: el ahorrador (con los intereses que cobra por tener el efectivo guardado en el banco), el banco (por la tasa de interés que cobra por prestar el dinero) y quien reciba el prestamos (por el dinero que recibe para concretar sus proyectos).
También se debe fomentar la filosofía de la inversión así la gente puede multiplicar sus ahorros mediante emprendimientos, proyectos y empresas nuevas.
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